lunes, 2 de noviembre de 2020

2020

Un Antes y un Después

¿Antes? 

Había demasiado, estaban todos y todo.

¿Después? 

Queda lo suficiente, lo mejor y más importante, Dios, Familia y verdaderos amigos.

¿Vida? ¿Sencilla o complicada?

 Es lo que tú haces de ella.


Y si, este año dio un duro golpe, dio lecciones que cambiaron la forma de ver la vida, ¿quito? Si, quito un ser querido, un sueño, un deseo y el mas ferviente anhelo del corazón, pero a la vez también proveyó, si, proveyó la oportunidad de crecer, volverse más fuerte, valiente, humilde, perseverante, creyente y fiel a Dios y sus promesas.

Este año permitió valorar lo que es realmente esencial a la vida, descubrir que no todo el que dice ser “amigo” lo es, no todo el que dice “te quiero” realmente lo siente, que la envidia esta a la vuelta de la esquina, que son los momentos difíciles los que abren la puerta de la realidad, muchas veces una dura realidad, pero a la vez un bagaje de experiencias de madurez personal y profesional.

Año atípico, si, quizás lleno de Crisis en la salud, en la economía y en las emociones, y aunque no lo parezca así, son esenciales, indispensables para descubrir quien eres y que quieres ser, a quien darle lugar en tu vida, porque es en cada una de ellas donde abres los ojos para descubrir quien es quien, quienes están para ti y aquellos a quienes definitivamente de tu vida debes sacar, es en cada una de esas difíciles situaciones en donde vez personificado el amor, la lealtad, la sinceridad y la amistad, es donde se pone en evidencia lo que hay en el corazón de los que te rodean. 

Y si, definitivamente la “normalidad” de antes en tu diario vivir, se convertirá en otra normalidad, porque aprendiste, maduraste y creciste, después de todo esto queda mucho, si, mucho que cambiar, no puedes volver a la vida con tu Yo de antes, tu nuevo Yo deberá procurar cada día mejorar, y sobre todo deberá olvidar lo que paso, pero no lo que aprendió. No es recordar lo difícil que fue, es recordar lo que te ayudo a seguir y lo que te hizo aprender. 

Ríe, ama, cree, vive y disfruta, permítete dar lo suficiente, porque lo que das habla de tu esencia, de ti, mas lo que recibes no depende de ti, es la expresión de lo que hay en el alma, en el corazón, es el ser de la otra persona. 

Cada situación vivida, es una lección aprendida,

con capacidades nuevas que te ayudan a seguir, y a cambiar tu forma de vivir.

Por. Clauvane Matute


No hay comentarios:

Publicar un comentario